Introducción
El esfuerzo por mejorar la calidad educacional ha llevado a la implementación de políticas potenciadoras de la formación del profesorado, en consideración a la importancia que se atribuye a estos agentes formadores en el mejoramiento educativo. Al respecto, una de las medidas de política que se viene impulsando con fuerza, en el contexto internacional, es la implementación de procesos rigurosos de selectividad en el ingreso a la profesión docente.
En tal sentido, países como Finlandia, Canadá y Singapur, naciones líderes en materia educativa (OECD, 2018), poseen una trayectoria selectiva que demuestra la importancia de reclutar candidatos idóneos para desarrollar su preparación profesional en programas de formación docente. Es así como, los postulantes deben demostrar una destacada trayectoria escolar que les permita superar pruebas de conocimiento y suficiencia académica (BCN, 2014); también, demostrar habilidades para el ejercicio de la enseñanza, esto último evaluado a través de entrevistas personales que buscan indagar en las motivaciones que los llevan a elegir una carrera de pedagogía como opción profesional (Pérez, 2015).
Para el caso de Chile, en los últimos años se han dispuesto diversas estrategias de atracción de estudiantes a carreras de formación de profesores. En el año 2011, se implementó la Beca Vocación de Profesor, beneficio económico que favorece a aquellos destacados puntajes en la Prueba de Selección Universitaria (PSU), otorgando incentivos económicos y la exención del pago de aranceles. También, han surgido iniciativas de naturaleza no gubernamental, como el de la Fundación Elige Educar, que busca mediante plataformas comunicacionales reivindicar el rol docente en sociedad, a través de campañas publicitarias de encantamiento que permitan atraer a jóvenes con talento y vocación de profesor, replicando con ello la experiencia Inglesa desarrollada por el organismo estatal Training and Development Agency for Schools o TDA (Agencia para el entrenamiento y desarrollo de las escuelas), que a través de estrategias comunicacionales e incentivos, logró posicionar a pedagogía entre las carreras de mayor demanda en el país (Medeiros et al., 2012).
Por otra parte, una estrategia reciente en el contexto nacional, y que busca asegurar el ingreso de buenos postulantes para la formación profesional del profesorado, es lo señalado en la Ley 20.903 o ley de Desarrollo Profesional Docente, que ha dispuesto una innovadora iniciativa para el reclutamiento de jóvenes interesados en seguir estudios pedagógicos. La estrategia convoca a las Instituciones de Educación Superior (IES), para que instauren programas de acceso especial a las carreras de formación pedagógica, los que por medio de un proceso de selección de candidatos, conforman un grupo de estudiantes que cumplen con un perfil académico destacado y con interés por proyectarse en la profesión docente. Surgen así, los programas de preparación y acceso temprano a las carreras de pedagogía.
Uno de los ámbitos que considera el proceso de reclutamiento de los programas, es el interés y motivación que manifiestan los jóvenes postulantes por desarrollarse en la profesión docente. En la actualidad, el campo de las motivaciones se ha transformado en una dimensión relevante en el estudio del acceso y desarrollo en la carrera docente, pues la densidad y rasgos de su presencia se vinculan con el compromiso, proyección e identidad con la profesión pedagógica (Pogré, 2012; Bilim, 2014). Al respecto, se ha planteado a la profesión docente como una de las mayormente complejas, por lo que la presencia de postulantes motivados vendría a otorgar mayores posibilidades de éxito en la profesión.
Estudios recientes, en contexto chileno, exponen la importancia de esta dimensión en la profesión docente, focalizando su interés en las motivaciones presentes en estudiantes de carreras de pedagogía (Avendaño; González, 2012). Otra investigación, estudia distintos perfiles motivacionales de estudiantes que cursan la carrera de pedagogía en enseñanza primaria, identificando tipos de perfiles según las variables motivacionales que el estudio propone (Valenzuela; Muñoz; Marfull-Jensen, 2018).
Considerando la importancia y actualidad de la problemática, es que en este artículo presentamos resultados de una investigación que tuvo como uno de sus objetivos, caracterizar las motivaciones que declaran los estudiantes de un programa de acceso temprano para elegir la carrera docente como opción profesional. Para el caso, se trabajó con estudiantes que formaban parte de un programa implementado por una universidad estatal y pública localizada geográficamente en el centro-sur de Chile, específicamente en la región de Ñuble1.
Como la mayoría de los estudios en el ámbito de las motivaciones se han focalizado en el proceso de formación inicial docente y con profesionales egresados, la presente investigación viene a generar conocimiento respecto de una etapa temprana de interés y motivación por la profesión docente; aquella que se desarrolla en la fase final de la educación secundaria o enseñanza media, como se denomina en Chile.
Motivaciones y Profesión Docente
La complejidad del contexto de desempeño en el que se desenvuelve el profesorado, hace importante contar con sujetos altamente motivados para el desarrollo en la profesión.
La motivación es entendida como una dimensión humana relevante “[…] por cuanto orienta las acciones y se conforma así en un elemento central que conduce lo que la persona realiza y hacia qué objetivos se dirige” (Naranjo, 2009, p. 153), satisfaciendo con ello, necesidades personales del individuo, sean éstas de corte sensible, asociadas al gusto por la realización de determinada actividad o de racionalización de los atributos o bondades que considera la elección de una actividad.
Las motivaciones pueden ser variadas y estar sujetas a aspectos intrínsecos y/o extrínsecos, de acuerdo con las investigaciones que las vienen estudiando, entre ellas la propuesta teórica de la autodeterminación de Ryan y Deci (2000). Estos autores proponen diferencias y características distintivas entre una y otra, asegurando con esto que la elección o definición profesional está impulsada por factores afectivos, donde se observa la realización de actividades de forma voluntaria, libre de recompensas externas, orientadas al gusto por hacer algo y la satisfacción personal y, también, por la obtención de recompensas materiales o externas, tales como el ingreso económico, las condiciones de trabajo y el estatus social.
En este contexto, la literatura señala que la motivación como energía movilizadora, descubre en cada sujeto motivos particulares o razones naturales sobre las cuales fundamenta una elección. En este sentido, las motivaciones están compuestas de necesidades, deseos, tensiones, incomodidades (Herrera; Zamora, 2014), entre otras, las que de acuerdo con la teoría referenciada se disponen como movilizadores motivacionales intrínsecos y/o extrínsecos. Desde este punto de vista, caracterizar las motivaciones en base a esta dicotomía es relevante, puesto que permite comprender la teoría estudiada, aplicada al contexto de la elección profesional docente.
Motivaciones altruistas-intrínsecas
Se reconoce en la motivación altruista-intrínseca componentes íntimos asociados a la sensibilidad personal como reguladores en la elección de una actividad específica, donde las actividades realizadas son en sí la propia recompensa para quien las realiza (Cano, 2008).
Ryan y Deci (2000) consideran que una persona que se implica en una tarea por su propio valor actúa movilizado por una motivación intrínseca, puesto que, su autodeterminación se convierte en una necesidad psicológica y de dominación de su entorno, generando sentimientos positivos de interés y placer o de felicidad. Por otro lado, se basa en la sensación de competencia por ser eficaz en una disciplina, interactuando con el ambiente para ejercer sus capacidades por lo que busca dominar los desafíos de la tarea, otorgándole una sensación de confianza que influye en sus acciones; además se genera un apoyo del entorno capaz de conceder bienestar psicológico que aporta en logro de las metas a través del esfuerzo y la persistencia.
Este tipo de motivaciones se vincula estrechamente con una dimensión social del ejercicio profesional docente, en su propósito de ayudar a otros (Sánchez-Lissen, 2002). Esto es representado como la satisfacción y alegría resultante de poder enseñar para que otros aprendan, y en la que el maestro se gratifica en la oportunidad de involucrarse en el crecimiento de los jóvenes y en su desarrollo escolar (Ronnes, 2011).
De esta forma, las motivaciones de naturaleza altruistas-intrínsecas movilizan a las personas a tomar decisiones en base a factores emotivos, vinculados al gusto y a la realización personal a través del desarrollo de actividades en las cuales se sientan competentes y hábiles. Para el caso de la elección profesional docente, esto se asocia con factores como el gusto por enseñar, por el trabajo con los niños, el gusto por una disciplina, el deseo de ayudar al desarrollo de otros, entre otros.
Motivaciones Extrínsecas
Otro ámbito de motivación, se relaciona con la elección profesional de acuerdo con factores extrínsecos o ajenos a la afectividad o satisfacción personal en base a la ayuda solidaria. Este tipo de motivaciones externas, está determinada según el enfoque conductual que busca a través de la realización de una actividad o profesión, la obtención de recompensas externas, sean estas bienes, puntajes/calificaciones, remuneraciones, prestigio, buenas posiciones en el empleo, entre otras (Cano, 2008).
La motivación extrínseca implica que, quien elija una actividad o profesión, racionalice en primera instancia los beneficios y consecuencias asociados a su elección profesional. En relación con esto, la evaluación o valoración de estos aspectos propicia en los sujetos una elección ponderada y coherente con las aspiraciones o ideales que persiguen en su futuro personal y profesional (Cano, 2008). En este sentido, factores como duración y costo de los estudios, posibilidades de inserción en el mercado laboral y empleabilidad resultan relevantes para definir la elección profesional (Gratacós, 2014); además, del prestigio o valoración social de la profesión.
En relación con la elección de la carrera pedagógica, García y Organista (2006) plantean que este tipo de motivaciones se asocia con la pretensión de movilidad social, en especial para aquellos estudiantes provenientes de sectores populares o socialmente desmedrados, y que ven en la profesión docente un medio o posibilidad de ascenso social y de acceso a la educación superior. En tal sentido, aquellos estudiantes de pedagogía que han direccionado su orientación profesional por razones extrínsecas, es porque han visto en el ámbito de la enseñanza beneficios como la remuneración económica, los períodos de receso y todo tipo de privilegios que pueda ofrecer la profesión docente (Roness, 2011).
Con todo, una elección consciente de la profesión docente involucra que el sujeto valore aspectos personales asociados al gusto, a sus habilidades y competencias personales para el desarrollo de la actividad, como también el reconocimiento de factores de retribución y valoración social de la profesión, de modo que las motivaciones surjan de procesos reflexivos y fundamenten la elección profesional en el tiempo.
Metodología
La investigación que se presenta se realizó desde el paradigma comprensivo-interpretativo, a partir de un diseño de investigación enmarcado en la metodología cualitativa. Nos resulta pertinente esta metodología, pues tiene por búsqueda alcanzar comprensión de una realidad investigada desde las comprensiones-significaciones de los propios sujetos que participan del fenómeno en estudio (Flick, 2012; Ruiz Olabuénaga, 2012).
El método de investigación cualitativo utilizado es el fenomenológico, puesto que permite generar conocimiento a partir de la experiencia subjetiva de los sujetos, por lo que considera la indagación en las comprensiones a fin de describir e interpretar los significados comunes aportados por los participantes de la investigación (Rodríguez; Gil; García, 1999).
Participantes
Los participantes del estudio fueron 16 estudiantes de un universo de 80 alumnos de las cohortes 2018 y 2019 del programa de acceso temprano a carreras de pedagogía Futuro Profesor UBB, quienes voluntariamente accedieron a participar de la investigación y con los resguardos éticos propios del trabajo con personas. Este programa fue implementado el año 2018 en una universidad estatal de la zona centro-sur del país, específicamente en la región de Ñuble y en el marco de la normativa educativa chilena que mandata la institucionalización de vías de ingreso especial para las carreras de pedagogía en universidades que imparten programas de formación docente. El programa ofrece un total de 40 cupos por cohorte, y donde los estudiantes son seleccionados en base a tres criterios: buen desempeño académico, prueba de potencialidades pedagógicas y entrevista personal para indagar en las razones y/o motivos para elegir una carrera de pedagogía. El ingreso universitario, se genera luego de la aprobación académica y vocacional de los estudiantes en el programa y con la rendición de la prueba de selección universitaria PSU.
En cuanto a la selección de los participantes de la investigación, se consideró un total de 2 alumnos por carrera, considerando que la oferta pedagógica contempla un total de 8 pedagogías, a saber: Pedagogía en Educación Parvularia, Pedagogía en Educación General Básica, Pedagogía en Educación Física, Pedagogía en Ciencias Naturales con mención Química, Física o Biología, Pedagogía en Castellano y Comunicación, Pedagogía en Educación Matemática, Pedagogía en Inglés y Pedagogía en Historia y Geografía. Respecto a los criterios de inclusión, se consideraron: a) participar en el programa Futuro Profesor UBB, b) manifestar interés por una carrera de pedagogía generalista o disciplinar y c) voluntariedad en la participación de la investigación. Al tratarse de estudiantes menores de edad, la participación se formalizó a través de una carta de consentimiento informado y una carta de asentimiento informado.
Instrumento de producción y técnica de análisis de la información
La técnica de producción de información utilizada fue la entrevista semiestructurada, validada por el juicio de expertos, cuyas áreas de investigación corresponden específicamente a educación y psicología y cuyos rangos de antigüedad en investigación van desde los 5 a 15 años. El guion se organizó en base a seis preguntas orientadoras; las que al momento de su aplicación fueron formuladas según la conveniencia y el contexto en el que se desarrolló la conversación (Beltrán, 2018), propiciando un diálogo dinámico y flexible. Estas se elaboraron considerando el objetivo de la investigación, identificar las motivaciones intrínsecas y/o extrínsecas que movilizan a los estudiantes para elegir una carrera de pedagogía.
Por su parte, la técnica de análisis de la información fue la denominada condensación de significados (Kvale, 2011). Este procedimiento, permite acotar los significados aportados por los participantes generando sintagmas breves, que llevan a la conformación de códigos los que, posteriormente, son agrupados en categorías de sentido.
Resultados
Para efectos de la presentación de resultados, las categorías de sentido levantadas del proceso de análisis de la información fueron caracterizadas y clasificadas según tipo de motivaciones que la teoría ya ha identificado. Nuestro aporte en este estudio es otorgarle contenido al tipo de motivaciones que se expresan en la elección de la profesión docente.
Motivaciones Altruistas-intrínsecas para la Elección de la Carrera Docente
Los componentes motivacionales de tipo altruistas-intrínsecos que movilizan a los estudiantes a elegir pedagogía como carrera profesional, considera tres dimensiones o categorías de sentido: valor social de la profesión docente, realización personal asociada a la enseñanza e interés por una disciplina escolar.
Valor social de la Profesión Docente
El valor social del profesorado, dado los alcances en los que puede incidir con miras al desarrollo íntegro de los estudiantes, es presentada como un aspecto motivacional para el ingreso a la profesión. Más allá, de no ser una profesión que otorgue retribución económica importante, el beneficio social que aporta a las personas se constituye en un valor trascendente. Por lo mismo, la retribución económica es considerada un aspecto secundario o de poca importancia para la mayoría de los participantes:
[...] el profesor afecta a la persona, eso es lo que más me llama la atención de ser profesor y la idea obviamente, de llegar a ser un profesor que afecte bien a los alumnos y que obviamente dé todas las habilidades para que el alumno se pueda desarrollar en lo que él quiera
(estudiante 16).
[...] otros profes que tengo yo, son muy bacanes, te enseñan a ser persona […] a ayudarle a los estudiantes en como tienen que ser
(estudiante 15).
[...] mi profesor […] él siempre me ha dicho que ser profesor es como una gran vocación por decirlo así porque él ayuda a muchas personas, literalmente todos los días y no recibe nada a cambio, ni monetariamente, él lo hace porque realmente tiene vocación y yo admiro eso de él
(estudiante 13).
En estrecho vínculo con el valor social de la profesión docente se encuentra la dimensión vocacional, la que es percibida como una actitud humanitaria muy vinculada a la filantropía o generosidad desinteresada que lleva a su portador a realizar entregas sobredimensionadas. Esta actitud o voluntad por hacer el bien es entendida como vocación docente, la que se vincula con aspectos como el sacrificio, desprendimiento y compromiso con el estudiantado. Los participantes visualizan en las actuaciones de sus docentes estas actitudes que sirven de ejemplo movilizador para interesarse por estudiar pedagogía. También, la vocación es representada en relación con el nivel de involucramiento con el otro-estudiante en el marco de actividades académicas donde la disposición del docente para atender requerimientos fuera de los espacios profesionales, se constituye en un indicador de vocación pedagógica. En general, resulta valorable la presencia continua y generosa del profesor/a, más allá de los espacios y tiempos laborales propios del sistema escolar:
[…] porque ser profe es estar siempre […], con mi amiga igual veo la vocación en mi profesora, porque una vez ella se fue de vacaciones y seguía respondiendo mensajes de estudiantes con dudas comunes, entonces eso me dejaba para dentro - oye pero estás de vacaciones – y me decía – qué tiene - y ahí como que uno igual aprende y reflexiona […] ya yo igual voy a ser así
(estudiante 15).
[…] mi profesor de inglés igual, es de esos profesores que aman su trabajo, que lo darían todo por él, yo veo vocación en ellos
(estudiante 9).
[…] uno les puede llegar y preguntar si tiene una duda, ellos no tienen mayor dificultad en decir no o sí puedo, incluso a la profesora por WhatsApp yo le puedo preguntar
(estudiante 2).
La idea de vocación docente se relaciona con la noción de compromiso social de quienes optan por la profesión pedagógica, compromiso que se refleja en la preocupación por dar permanentes respuestas a las inquietudes y requerimientos de los estudiantes. En este sentido, el ser docente se visualiza como una actividad profesional de alto valor social, que se constituye en una inspiración movilizadora para ingresar a carreras de pedagogía.
Realización Personal Asociada a la Enseñanza
La realización de actividades que son de gusto personal, considera para quien las ejerce poner en práctica ciertas habilidades y competencias, generando de este modo estados emocionales de plenitud y felicidad por la tarea realizada. En este sentido, el ejercicio de la enseñanza es visualizada por los participantes como una actividad que genera sentimientos de satisfacción personal que derivan de la idea de ayuda y contribución para la superación de otros, cuestión que se refleja en los siguientes relatos:
[…] más que nada quiero estudiar pedagogía porque es lo que a mí me gusta y siento que así me puedo realizar como persona
(estudiante 2).
[…] yo con esto quiero hacer un cambio e irme a colegios rurales […], poder generar un cambio para la gente que no tiene las oportunidades de estar en un colegio de calidad
(estudiante 16).
[…] siento la necesidad de contribuir a formar niños felices
(estudiante 1).
Se visualiza una proyección profesional asociada a una intencionalidad de incidir en la generación de cambios para sus futuros alumnos, a través de los beneficios que podrán otorgar por medio de la enseñanza. También, los moviliza el interés por asumir responsabilidades de contención emocional y apoyo educativo para las generaciones más pequeñas provenientes de sectores con alta pobreza de la sociedad, en las que las conductas de abandono y vulnerabilidad requieren de grandes esfuerzos del profesorado: “[…] entonces prefiero tener un trabajo en el que […] por lo menos voy a llegar a mi casa diciendo, hoy hice una buena obra, ayudé a algún niño o algo así” (estudiante 9).
En este sentido, la motivación del estudiantado por proseguir estudios pedagógicos, se configura en una suerte de “idealización” de la profesión docente, pues se concibe al profesorado como un gestor de oportunidades que contribuye a la realización de otros y por consecuencia a la realización personal propia. Por lo general, quienes manifiestan su interés por estudiar pedagogía desde estos intereses, lo hacen desde perspectivas muy imbricadas con una dimensión vocacional del oficio docente.
Interés por una disciplina escolar
El interés o afinidad por un área o disciplina escolar específica, se asocia con la capacidad y habilidad del estudiante para entenderla y aplicarla de forma efectiva dentro del contexto de desempeño escolar. Por su parte, la (auto) percepción del estudiante y su entorno es un aspecto fundamental, ya que esto reafirma las competencias y el dominio de determinada asignatura que lo hace acreedor de cierto prestigio frente a sus pares y profesores, y para el caso de esta investigación se estableció como una dimensión relevante para proseguir estudios pedagógicos:
[…] me gustan las ciencias, me va bien en esto y por eso mi interés por esta área en particular
(estudiante 5).
[…] matemática es lo más fácil, leo cinco minutos lo que anoté en el cuaderno y doy la prueba, por eso voy esa carrera
(estudiante 8).
Al respecto, las habilidades y competencias innatas del estudiante en relación con una asignatura específica dentro de su trayectoria académica, direcciona la elección profesional hacia una carrera de pedagogía, desde el vínculo generado en el gusto por una determinada disciplina escolar.
Motivaciones extrínsecas para la elección de la carrera docente
Los componentes motivacionales de tipo extrínsecos que movilizan a los estudiantes a elegir pedagogía como carrera profesional, considera dos categorías de sentido: beneficios de la profesión docente y la academia como aspiración profesional.
Beneficios de la profesión docente
Es sabido que la profesión docente es de aquellas que no puede catalogarse como de altos ingresos económicos, más bien su característica ha sido su precarización salarial y bajo status profesional. Sin embargo, se visualiza en ella ciertos “privilegios” o beneficios que resultan de interés para algunos estudiantes a la hora de definir su elección profesional, en relación con otras opciones de estudios superiores, como es el caso de los tiempos de receso y/o vacaciones que se presentan en el ejercicio docente:
Una cosa que me llama la atención son las vacaciones que tienen los profesores ¿son dos meses cierto? Y en ninguna otra profesión te dan dos meses de vacaciones
(estudiante 8).
[…] los profesores en sí se lo merecen (las vacaciones) porque todo el esfuerzo que tiene implicándose en ese tiempo durante el año y aparte de enseñar tienen que hacer cosas por fuera de la sala, por lo que es un buen incentivo para trabajar ahí
(estudiante 12).
Los estudiantes valoran este tiempo de receso como un beneficio profesional, pero también reconocen el arduo esfuerzo demostrado por los docentes durante el año académico. Aunque parezca que la elección de la profesión docente desde las motivaciones extrínsecas, considera una mirada más estratégica, instrumental o técnica, se puede decir que la visualización de estos aspectos más prácticos, evidencia la racionalización de la elección, considerando ventajas y beneficios. Para el caso de una carrera de pedagogía, si bien la elección inmediata no se da por aspectos asociados a los tiempos de receso, esto puede considerarse como un atractivo que despierta el interés en el estudiantado a la hora de elegir la profesión.
La academia como aspiración profesional
Si bien, la carrera docente no es valorada en el discurso social común como una profesión prestigiosa, se constata un conocimiento por parte de los estudiantes de espacios o contextos profesionales que escapan a la docencia de aula en establecimientos educacionales y que reciben una positiva valoración. Es el caso de la docencia universitaria o el desarrollo profesional dentro de la academia, la que se constituye en una fuente movilizadora para ingresar a estudiar pedagogía:
[…] creo que me gustaría ser profesor de la universidad, eso me motiva
(estudiante 8).
[…] me encantaría la idea de ser profesora universitaria, poder indagar por esos lados
(estudiante 9).
Veo mayor prestigio trabajar en la universidad, si yo creo que hay un poco más de prestigio, porque en la universidad es como distinto, es como algo más superior quizá, no cualquiera puede llegar ahí
(estudiante 14).
Esta proyección en la academia se visualiza también como un espacio restringido y distante, el que se concibe como un ideal aspiracional, reservado solo para un grupo de docentes privilegiados por su continua preparación académica, el que además es entendido como un círculo profesional de elite. En este sentido, los estudiantes tienen claro conocimiento que este prestigio asociado a la docencia universitaria, es consecuencia de una formación posterior que complementa y profundiza los conocimientos adquiridos en la formación inicial docente, y está asociado a la adquisición de grados académicos que otorgan este prestigio profesional: “Quiero llegar a ser profesor universitario, quiero después sacar un magíster en filosofía y luego un doctorado en educación para poder hacer clases en alguna universidad” (estudiante 16).
La posibilidad de acceder a la docencia en la academia se instituye, entonces, en una potencial fuerza movilizadora para acceder a la profesión docente. En este sentido, se advierte la distinción en los estudiantes entre “formación como profesor/a” y “formación del profesorado”, como posibilidad futura de desempeño profesional y, a la vez, asociada a dimensiones de prestigio y valoración social que la misma profesión puede otorgar.
Discusión
En primer lugar, cabe destacar la predominancia de los componentes motivacionales altruista-intrínsecos en la elección profesional de los jóvenes que participan del programa de acceso temprano a pedagogía. En sus relatos, declaran que sus pretensiones profesionales están cimentadas en aspectos sociales muy sensibles a la realidad que los envuelve. En tal sentido, el contexto escolar de proveniencia, en su mayoría de Liceos municipales con altos niveles de vulnerabilidad socioeconómica, puede leerse como un factor explicativo de la comprensión que poseen respecto del rol profesional y el relevante aporte socioeducativo que pueden realizar los profesores a las generaciones futuras. Es decir, en la necesidad de contribuir a la transformación social a través de la enseñanza y, para ello, se atribuye al profesorado la responsabilidad de aportar a la formación de la persona, no solo desde lo académico sino también desde lo valórico. En este sentido, la elección profesional de los jóvenes atribuye un sentido transformador a la enseñanza, desde la que se comprende la dimensión altruista de la teoría motivacional, pues focaliza su proceder en las oportunidades de cambio que la educación es capaz de producir en las generaciones futuras, en favor de su desarrollo personal y/o socioafectivo.
Por otra parte, un aspecto que incide en la elección pedagógica, especialmente la disciplinar, resulta ser la experiencia escolar de los estudiantes, en tanto la presencia e impronta pedagógica de determinados profesores se constituye en un aspecto significativo que moviliza la elección profesional, sustentada en la admiración por el compromiso y capacidad de enseñanza que despliegan ciertos docentes en su quehacer cotidiano. De esta manera, la biografía escolar impacta en cómo es pensada la labor pedagógica, pues desde esta perspectiva puede entenderse las características que los estudiantes asignan a ser un buen enseñante y la idea que se construye sobre el significado del ser docente. Esta idea se complementa con lo planteado por Gimeno Sacristán y Pérez (1996), quienes relevan la importancia de los docentes dentro de la biografía escolar del estudiantado, considerando que el interés temprano por seguir los estudios pedagógicos se despierta, generalmente, desde la admiración de los referentes educativos-escolares, quienes a través de sus prácticas educativas socializadas al interior del entorno escolar generan motivación por la elección del magisterio, transformándose en un componente movilizador para optar por una carrera de pedagogía.
Otro aspecto interesante de considerar, también, es la presencia de componentes motivacionales extrínsecos en la elección de la carrera docente. Como se sabe, históricamente, la profesión pedagógica en el contexto latinoamericano ha sido considerada como de bajo estatus social, aunque con las recientes políticas de desarrollo profesional docente se han visibilizado y promovido ciertas garantías laborales y un mejoramiento de las condiciones salariales, que la sociedad y los jóvenes están percibiendo como atractivas para desarrollarse personal y materialmente. También, el interés de los jóvenes por proyectarse en estudios de postgrado, para acceder a contextos o espacios de desempeño profesional de mayor prestigio (la academia), habla del conocimiento que hoy existe respecto de las posibilidades y proyecciones de la profesión docente. Al respecto, la información que se dispone hoy sobre los campos laborales y posibilidades de desarrollo de la profesión docente, favorecen la emergencia de componentes motivacionales extrínsecos entre los postulantes a la carrera pedagógica.
Conclusiones
El estudio ha permitido evidenciar la prevalencia de las motivaciones intrínsecas por sobre aquellas de carácter extrínsecos, en un programa de acceso temprano a carreras de pedagogía. En tal sentido, el valor social atribuido a la profesión docente lleva a movilizar un interés y atracción por la profesión desde una dimensión altruista por el carácter de transformación social que se visualiza en la labor cotidiana del profesorado. En la gestación de este interés y motivación por proyectarse en la carrera docente, desempeñan un rol gravitante aquellos profesores referentes o memorables que marcaron la trayectoria escolar de los estudiantes y que permitieron visualizar la labor educativa como posibilidad profesional.
De acuerdo con los resultados, el predominio de motivaciones intrínsecas-altruistas en la elección de la carrera docente debiese asociarse a un mayor compromiso e identidad con la profesión pedagógica, de acuerdo con lo postulado por la teoría educativa. Sin embargo, se requiere de mayor información y estudios longitudinales que permitan relacionar este tipo de motivaciones, en una etapa temprana, con las proyecciones y éxito en el desarrollo profesional.
Por último, resulta de interés indagar en los alcances y proyecciones que tiene el programa de acceso temprano a carreras de pedagogía, con presencia de un grupo de jóvenes interesados en seguir la profesión docente desde un predominio de motivaciones intrínsecas. Ello porque, la autopercepción de los participantes de la investigación respecto a sus habilidades y aspiraciones es un hecho relevante, considerando que estos reconocen sus propias potencialidades, direccionándolas al ámbito profesional con la intención de disponerlas al mejoramiento del sistema educativo. Sin embargo, no es posible augurar si las motivaciones iniciales son lo suficientemente estables como para determinar su predominancia a través del tiempo tal como lo requieren las iniciativas de atracción docente. También, se debe considerar que el estudio abordó la realidad específica de uno de los programas de acceso temprano existentes en el país, por lo que sus resultados requieren ser complementados con otras investigaciones que permitan ampliar, triangular y profundizar las categorías propuestas.